9 may 2010

Tratamiento de la basura (parte II)

Cada vez se generan mas residuos de basura en España.

Composición de los RSU (Residuos solidos urbanos)

Los residuos producidos por los habitantes urbanos comprenden basura, muebles y electrodomésticos viejos, embalajes y desperdicios de la actividad comercial, restos del cuidado de los jardines, la limpieza de las calles, etc. El grupo más voluminoso es el de las basuras domésticas.
En España la cantidad de RSU generada por habitante y día es de alrededor de 1 kilogramo en las ciudades grandes y medianas, y algo menor en ciudades pequeñas y pueblos. En las zonas rurales se aprovechan mejor los residuos y se tira menor cantidad. En EEUU la media es de más de 2 kilogramos por habitante y día. En los lugares turísticos las temporadas altas suponen una aumento muy importante en los residuos producidos, también épocas especiales como fiestas y ferias, acontecimientos deportivos importantes, etc. En verano la proporción de materia orgánica suele ser mayor, mientras que en invierno aumenta la proporción de cenizas.
Los residuos sólidos urbanos en España se encuentran regulados por medio de tres medidas de carácter jurídico, que son la Ley del año 1998 de Residuos; el Plan Nacional de Residuos Urbanos (PNUR) 2000 - 2006 y el Plan Nacional Integrado de Residuos (PNIR) 2008 - 2015.

La primera ley es aplicable a cualquier clase de residuo con la excepción de las emisiones atmosféricas, los residuos radioactivos, los vertidos de efluentes líquidos a las aguas continentales, los vertidos desde la tierra al mar y los vertidos provocados por los buques y aeronaves al mar.

Esta Ley tiene por objeto prevenir la producción de residuos, establecer el régimen jurídico de su producción y gestión y fomentar su reducción, su reutilización, reciclado y otras formas de valorización, con la finalidad de proteger el medio ambiente y la salud de las personas.

El tratamiento abarca tres etapas:
1. Depósito y recogida.
2. Transporte.
3. Tratamiento.

1. Recogida.

La recogida de los residuos urbanos consiste en su recolección para efectuar su traslado a las plantas de tratamiento.

Existen dos tipos:
Recogida no selectiva.
En la primera, los residuos se depositan mezclados en los contenedores, sin ningún tipo de separación. Ha sido la habitual hasta hace algunos años.

Recogida selectiva.
Esta se hace separando los residuos según su clase y depositándolos en los contenedores correspondientes. Así, existen normalmente contenedores para el papel, vidrio, envases y la materia orgánica.
Este sistema requiere un elevado grado de concienciación y colaboración ciudadana para funcionar.

En Europa se ha adoptado un código de colores unificado para los contenedores.
* Contenedor verde para el vidrio.
* Contenedor azul para el papel y cartón.
* Contenedor amarillo para los envases.
* Contenedor gris o marrón para los residuos orgánicos.

En cuanto a su ubicación se ha optado por soluciones hacia las distintas realidades urbanas. Es habitual encontrar contenedores de papel y vidrio distribuidos por manzanas en un determinado radio.
También se suelen recoger otros más voluminosos (colchones, muebles, etc) y residuos inertes como escombros, fruto de pequeñas reparaciones domésticas.

Lo que respecta a la recogida en sí existen dos métodos :
Recogida por medio de vehículos.
Es la más habitual. Se utilizan unos u otros según el tipo de residuos. Estos vehículos se perfeccionan más cada día con el fin de reducir las molestias que generan las operaciones de recogida.
Recogida neumática.
Este tipo de recogida exige una inversión inicial en la construcción de las instalaciones que han de ir bajo tierra. Sólo es factible en áreas de nueva urbanización. A cambio exige un menor desembolso en costes de personal y genera pocas molestias a los ciudadanos. Comenzó a utilizarse en los países nórdicos en la década de los 60. Mediante un sistema de conducciones neumáticas subterráneas se conduce la basura hasta las estaciones de transferencia donde se procede a su traslado a la planta de tratamiento. En España existen algunas.

2. Transporte.

En esta etapa se realiza el transporte de los residuos hacia las estaciones de transferencia, plantas de clasificación, reciclado, valorización energética o vertedero.

Las estaciones de transferencia son instalaciones en las cuales se descargan y almacenan temporalmente los residuos para poder posteriormente transportarlos a otro lugar para su tratamiento. Una vez allí se compactan y almacenan y se procede a trasportarlos en vehículos de mayor capacidad a la planta de tratamiento.

3. Tratamiento.

Es la etapa final del proceso y la de mayor importancia. Si los residuos vienen ya separados desde el origen como es el caso del papel o el vidrio se dirigen directamente a la planta de reciclado. Si vienen juntos como es el caso de los envases hay que separarlos según su naturaleza.

El proceso de selección se realiza mediante diversos sistemas:

* Metales férricos. Por medio de campos magnéticos.
* Metales no férricos. Triaje manual y por corrientes de Foucault.
* Papel y cartón. Se seleccionan por triaje manual.
* Plásticos duros. Por triaje manual.
* Plástico film. Mediante sistemas neumáticos.
* Vidrio de color. Por triaje manual.
* Vidrio blanco. Por triaje manual
* Materia orgánica. Es el sobrante de los procesos anteriores.

Una vez separados los residuos hay que realizar su tratamiento.
1. Reciclado.
2. Valorización energética.
3. Vertido controlado

En España operan tres Sistemas integrados de Gestión:

* ECOEMBES. Trata todos los materiales presentes en los envases.
* ECOVIDRIO. Gestiona sólo el vidrio.
* SIGRE. Gestiona los restos de medicamentos y sus envases

Los sistemas integrados de gestión son entidades sin ánimo de lucro, que se sostienen gracias a los aportes que reciben de las empresas asociadas, para costear los gastos de gestión de los residuos de envases que su actividad pone en el mercado. Además, estos sistemas realizan periódicamente campañas de información ciudadana, educativas, con el fin de incentivar la colaboración de los ciudadanos en la separación de los residuos.

El Plan Nacional (PNIR) 2008 – 2015, integra todos los planes autonómicos ya establecidos previamente.

Incineración: Quemar las basuras tiene varias ventajas, pero también algún inconveniente. Entre las ventajas está el que se reduce mucho el volumen de vertidos (quedan las cenizas) y se obtienen cantidades apreciables de energía. Entre las desventajas se producen gases contaminantes, algunos peligrosos para la salud humana, como las dioxinas. Existen incineradoras de avanzada tecnología que reducen mucho los aspectos negativos, pero son caras de construcción y manejo y para que sean rentables deben tratar grandes cantidades de basura.