9 sept 2010

El reciclaje de pilas usadas (Parte II)

por Lorena Ávila Cantisani
Las pilas nos facilitan el uso de muchos de los aparatos que necesitamos en nuestra vida diaria, pero una vez agotadas, si las tiramos con el resto de los residuos, terminarán en vertederos (contaminando las aguas subterráneas y el suelo y con ello se introduce en las cadenas alimenticias naturales, de las que se nutre el ser humano) o en plantas de incineración (cuyas emanaciones resultantes dan lugar a elementos tóxicos volátiles, contaminando el aire.
Pero... ¿hacia donde deben ir las pilas?
Deben llevarse a una planta de reciclaje donde se segreguen y separen los metales peligrosos. Pero, lamentablemente, existen pocas en el mundo, ya que el proceso utilizado requiere una elevada inversión económica. Argentina no cuenta con una.
Les sugiero adquirir equipos que no requieran pilas. Comprar sólo pilas recargables y mejor si son de Ni-MH (Niquel-Hidrato de Metal) o de óxido de plata y las de Zinc-Aire; cuyos compuestos son de baja toxicidad; y evitar aquellas que contienen mercurio y cadmio.
Como consumidores debemos favorecer la NO contaminación y recuerde: lo que tiramos a la tierra, vuelve a nosotros de una forma u otra.